EL CONVENTO DE SANTA ANA DE VILLASANA ACOGE UNA EXPOSICIÓ SOBRE EL PINTOR MODERNISTA, GUSTAV KLIMT.
La muestra, que forma parte del programa de Exposiciones Alacarta de la Consejería de Cultura y Turismo de la Junta de Castilla y León, permanecerá abierta al público del 13 al 29 de marzo en las dependencias expositivas del antiguo edificio conventual de Santa Ana.
El pintor austriaco, Gustav Klimt (Baumgarten, 1862- Alsergrund, 1918), fue uno de los principales representantes del modernismo vienés o estilo Sezession, variante nacional del movimiento artístico denominado modernismo, que se desarrolló en Europa entre finales del S. XIX y las dos primeras décadas del siglo XX, y que propugnaba una nueva estética frente al academicismo y los estilos historicistas imperantes en la época. No en vano, el lema de los artistas de la Sezession vienesa era “A cada tiempo su arte, y a cada arte su libertad” ("Der Zeit ihre Kunst, der Kunst ihre Freiheit").
Gustav Klimt.
Así pues, la producción artística de Gustav Klimt refleja de forma paradigmática el tránsito del eclecticismo a los comienzos del simbolismo y el arte abstracto, nuevas formas de expresión artística que alcanzarían su máximo desarrollo con las vanguardias artísticas de la primera mitad del siglo XX.
LA EXPOSICIÓN
La muestra se compone de quince paneles explicativos que versan sobre las diferentes épocas pictóricas del artista, desde su faceta más paisajística a los dibujos abiertamente eróticos y la relación con su modelo favorita, Emilie Flöge. Entre sus obras más representativas, se encuentran su famoso cuadro “El Beso”, obra icónica ampliamente reproducida, “Friso de Beethoven” o “Retrato de Adele Bloch-Bauer I”, obra que inspiró la película británica “La dama de oro” (Woman in Gold, 2015), que narra la batalla legal emprendida por María Altman, descendiente de la familia austriaca de origen judío, Bloch-Bauer, por la recuperación de éste y otros cuadros que sus familiares habían encargado a Klimt y que fueron incautados por los nazis tras la ocupación alemana de Austria en 1938. El “desprecio” que el régimen nazi profesaba por las nuevas corrientes estéticas surgidas en Europa en el cambio de siglo, no fue óbice, sin embargo, para que llevara a cabo un expolio sistemático de numerosas obras pertenecientes a lo que consideraban “arte degenerado”, dado el alto valor económico que poseían tales piezas, como las obras de Klimt, que en los últimos años han alcanzado cifras astronómicas en las subastas de arte.
La exposición podrá visitarse en el convento de Santa Ana de Villasana del 13 al 29 de marzo
en el siguiente horario:
- Martes- sábado: de 17 a 19h.
- Domingos: de 12 a 14h.